martes, 23 de julio de 2013

Summer Love: Capítulo 2

Llevas toda la noche pensando. Pensando el motivo por el que Sam te ha dejado. Y no encuentras ninguno. Vuestra relación era simplemente perfecta. Tu móvil suena. Es Jenny, tu mejor amiga. Decides cogerlo, pero antes te haces de rogar y dejas que suene dos veces más.

- ¡Mai! Soy Gee.
- Hola Jenny… - Replicas con un tono amargo. Con desgana
- ¿Te acuerdas del concierto?
- ¡Qué diablos! Si
- Pues no sé si te acordarás, pero es mañana – Su voz es chillona y taladrante.

No recordabas que habían pasado dos semanas. Llevabas todo ese tiempo en tu habitación. Sin comer. Sin dormir. No te hacía falta. A pesar de eso, no quieres decepcionar a tu amiga y respondes con un tono sarcástico:
- ¡Qué ilusión, estoy impaciente!

Debéis salir a las ocho de la mañana para llegar a Manchester antes de las doce. Un autobús rojo para enfrente de tu casa. “Que típico” piensas. Una vez dentro, observas a la gente. La mayoría son mujeres. Divisas a un par de chicos mayores que tu y te arreglas tu pelo rizado. Eres coqueta. Quieres gustarles. Pasas a su lado y buscas a Jenny. La encentras hablando con Tiffany, su prima. De pronto oyes un sonido. Sabes que es tu vieja Blackberry. La desbloqueas y ves de inmediato un mensaje de Sam. Lees. El mensaje dice: “Me voy ya. Pensé que querías despedirte de mí. Sam.” Al leerlo lloras. Lloras más que nunca. Te escondes en el piso de arriba del bus y piensas. Piensas en todo lo que habéis vivido juntos. Piensas en los planes que habíais hecho para verano. Ya no lo volverás a ver. De pronto, el autobús frena, dejando tras de sí un pitido. Ya habéis llegado a Manchester. Aún son las once y decides dar una vuelta. Sin darte llegas a una playa de arena lisa. Y te sientas. El silencio te invade y por fin consigues desconectar. Pasas media hora mirando el cielo. Cierras los ojos durante unos instantes, y al abrirlos, ves una sombra. Es una persona. Se dirige a ti. De pronto se sienta a tu lado. Te mira.

- ¡Hola! Soy Harry – Su voz grave penetró en mis oídos
- Hola… - Añadí distraída
- ¿Va algo mal ?
- Todo va mal – respondes enfurecida

De pronto aquel desconocido te mira y sonríe. Coge tu mano. La acaricia. Giras la cabeza y le miras. Su belleza te maravilla. Su pelo es rizado, como el tuyo, y sus ojos acaramelados. Se parece a Sam. Oh! Sam. Vuelves a recordarlo y miras la arena. Pensando. De pronto Harry te retira de la cara un mechón de pelo y dice:

- Así estas mucho mejor

Pero eso no te hace sentir mejor. Una lágrima se precipita por tu mejilla. No llega hasta el final. Harry apoya la mano en tu mejilla, y con el dedo pulgar, seca tus lágrimas. Le miras y sonríes. Él hace lo mismo. Te fijas en los maravillosos hoyuelos que se forman en su cara al reír. Sin pensarlo preguntas:

- ¿Qué te trae por aquí?
- He venido con mis 4 amigos por razones de trabajo – Responde amablemente
- ¿Qué hay de ti?
- He venido con una amiga a un estúpido concierto. Creía que me iba a olvidar de Sam, pero no es así.
- ¿Todo esto es por ese tal Sam? – Me pregunta

Asientes y le cuentas lo sucedido. Pronto te sientes mejor, pero no consigues olvidar a Sam. De repente Harry te rodea la cintura con sus brazos y te abraza tiernamente. Es justo lo que necesitas. Haces lo mismo. Le devuelves su abrazo. Su cabeza choca con la tuya y sientes su respiración en tu cuello. Sientes como la piel se te pone de punta. Roza tu pelo. Su mano se funde entre los rizos de tu cabello. Coge tu barbilla y te levanta la cabeza suavemente. Eso te gusta. Sin pensarlo acerca sus labios a los tuyos. Te besa durante unos segundos y luego tú retiras la cabeza. Él te mira y sonríe. Tú pones una excusa y te vas. Por el camino piensas en él. Harry. Al besarte con el habías sentido una sensación muy extraña. Sentías que erais una sola persona. Recuerdas las calles por las que has pasado antes. En una de ellas ves a cuatro chicos. Mayores. Están buscando algo, o tal vez a alguien. Decides no parar a preguntarles que buscan y vuelves rápido a la parada del autobús.Encuentras a Jenny. Le dices:

- Gee, no te puedes imaginar lo que ha pasa…
- Cállate Mai, llevas dos horas fuera, y vamos a llegar tarde al concierto
- Gee! Puedes dejar de hablar de esa estúpida banda. Nunca los vas a conocer. – Le dices llena de furia

enny te ignora y coge tu mano. Te arrastra a un estadio. Ves a miles de chicas gritar, y te espantas. Finalmente conseguís abriros camino entre las desagradables fans. Vais a la taquilla. Allí ves un cartel con el nombre de la banda. Repasas los personajes y encuentras a alguien que te parece familiar. De pronto reconoces a los cuatro chicos que parecían buscar algo cerca de la playa, y justo a su lado, a Harry. — with (Add/edi